
Investigadores de Brasil han hecho un descubrimiento prometedor: una molécula encontrada en el veneno del escorpión amazónico (Brotheas amazonicus) tiene la capacidad de destruir células de cáncer de mama. Esta molécula fue bautizada como BamazScplp1, y actúa provocando necrosis, es decir, rompe y mata las células tumorales, de manera similar al funcionamiento de la paclitaxel, un medicamento ampliamente utilizado en la quimioterapia.
Este avance fue presentado durante la FAPESP Week France, un evento científico celebrado en junio de 2025 en Toulouse, Francia. Para lograr estos resultados, los científicos reprodujeron los genes del veneno en bacterias y hongos (un proceso llamado expresión heteróloga). Esto les permitió producir la molécula en el laboratorio sin necesidad de extraer más veneno del escorpión.
Los ensayos de laboratorio mostraron que BamazScplp1 es tan efectiva como la paclitaxel en matar células cancerosas, lo cual es relevante porque el cáncer de mama sigue siendo una de las principales causas de muerte en mujeres a nivel mundial.
Además, este equipo también está investigando otros venenos, como los de serpientes, para encontrar más compuestos que puedan ser útiles en medicina. De hecho, ya están en fase 3 de pruebas clínicas con un sellador biológico hecho a partir de proteínas de serpiente.
En resumen, el estudio de venenos animales como fuente de medicamentos innovadores está ganando fuerza, y este hallazgo es un paso más hacia terapias más efectivas y posiblemente menos agresivas para tratar enfermedades como el cáncer.