
Su conocimiento profundo de diseño sonoro le permite crear capas ricas y minimalistas a la vez, que no sacrifican cuerpo ni intensidad. Su música es hipnótica sin recurrir a lo obvio, evocadora sin forzar la emoción. Discos como Layers of Compassion (Non Series White) son prueba viva de eso: una arquitectura sonora precisa, pero con alma.
Nacido y criado en Bruselas, Altinbas se crió en una casa donde el electro y el hip hop se colaban por la puerta de su hermano mayor. Afrika Bambaataa, Cybotron, Planet Patrol… El pulso mecánico de los 80 marcó su infancia.
“We also had videocassettes of DMC World Championships, which I would watch a lot as a kid”
“También teníamos videocasetes de los campeonatos DMC, que veía mucho cuando era niño.”

Esos sets legendarios, con cortes precisos y scratches imposibles, le volaron la cabeza. Pero no fue sino hasta los 19 o 20 años que pudo empezar a mezclar por sí mismo. La llegada del techno a su vida coincidió con esa independencia. Fue su inicio formal, pero en realidad ya llevaba años empapándose de sonido.
Su nombramiento como residente de Fuse, el club más icónico de Bélgica, no solo es un reconocimiento a su técnica, sino al camino que ha construido con paciencia.
“Fuse is the club where I went to for my first techno night… Now to be able to stand on the other side as a resident… it still feels weird. But it’s a good weird.”
“Fuse es el club al que fui por primera vez a una noche de techno… Ahora poder estar al otro lado como residente… todavía se siente raro. Pero es un raro bueno.”
*Revive el set de Altinbas en la TechnoFeria II de Medellinstyle. Pura energía, precisión y sonido que no perdona*
Y aunque Altinbas sigue fiel al techno, no le teme a desviarse. IDM, electro, DnB, downtempo: su paleta se expande constantemente. Hay un hilo conductor, eso sí: percusión interesante, grooves infecciosos y una estética sombría que te atrapa y no te suelta.
“I still had a lot of things to ‘say’ in that particular style.”
“Todavía tenía muchas cosas que ‘decir’ en ese estilo en particular.”
Con el lanzamiento de su propio sello, Observer Station, Altinbas busca una mayor libertad para explorar diferentes estilos musicales sin las limitaciones de las expectativas externas:
“I think having my own imprint will give me the freedom to finally get all this music out… even if it’s not necessarily club music.”
“Creo que tener mi propio sello me dará la libertad de finalmente sacar toda esta música… incluso si no es necesariamente música para clubes.”
Este espacio le permite experimentar y compartir sus creaciones más personales, manteniendo siempre una conexión profunda con la esencia del techno. Así que si todavía no lo conoces, este es el momento de descubrir por qué Altinbas está construyendo uno de los universos más auténticos y versátiles del techno actual.
Escucha a Altinbas aquí: