Japón acaba de romper los límites de lo posible en internet: científicos lograron una velocidad de 1,02 petabits por segundo, lo que significa, en pocas palabras, que podrías descargar todo el contenido de Netflix en un solo segundo. Esta hazaña fue alcanzada por investigadores del Instituto Nacional de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (NICT), junto con Sumitomo Electric y socios europeos, usando una fibra óptica especial de 19 núcleos, tan delgada como las que ya usamos, pero con un poder de transmisión brutal.
Además de la velocidad absurda, los datos recorrieron una distancia de 1.802 kilómetros sin perder calidad, lo que equivale a enviar esa cantidad de información desde Nueva York hasta Florida… en un segundo. Aunque por ahora se trata de un experimento en laboratorio, lo interesante es que esta tecnología podría funcionar con la infraestructura actual, lo que la hace viable para una implementación a gran escala.
En cifras prácticas, esta conexión es 16 millones de veces más rápida que el internet promedio en Colombia y más de 4 millones de veces más veloz que en países como Estados Unidos. Si bien todavía no podremos tener esa velocidad en casa, este récord japonés no solo marca un nuevo hito técnico, sino que acelera el futuro de la conectividad global mucho más de lo que imaginábamos.
